En presente y Pasado del Rock hoy tenemos a Don Vicente.
Esta banda nace en el año 2000 con Maxi Pascual en batería, Luis Garegnani en bajo y Facundo Escudero en guitarra (ex De Zero), un tiempo mas tarde se suma Manuel Enríquez en segunda guitarra. Faltaba una voz, se prueba Luciano Quintana sin tener suerte y aparece en escena Matías Calzetta (ex. Mema) que de ahí en mas fue irremplazable.
La banda se termina de consolidar cuando Maxi pascual y Garegnani abandonan la banda y en su lugar entran Darío Lescano (ex. De Zero) en batería y Juan Pablo Calzetta en bajo.
En algún momento también pasó por la batería “Pipi Díaz”.
La ocurrencia del nombre aparece luego de haber barajado varios como Abril o Leche. En el casamiento de Matías Calzetta el cura devela su segundo nombre que viene de una antigua herencia atrayendo la atención de los integrantes de la banda quienes deciden llamarse Don Vicente.
También manifestaron que el nombre hacia referencia a personaje místico, un espíritu de galera y bastón que vivía entre ellos y habitaba lugares sombríos.
Ellos consideraban que interpretaban un estilo de música alternativa con una gran influencia de bandas que los han marcado, como The Beatles, U2, The cure, Rolling Stones, Pearl Jam, Stone Temple Pilots, Radiohead, Kula Shaker, Palo Pandolfo, Soda Stereo entre otras. Cuentan con dos discos, el primero llamado “La Luz” grabado en los estudios Casa Frida en Capital Federal en el año 2004 y el segundo “Implosión” en el 2008. Si bien fue grabado y mezclado en ese año saldrá a la venta en poco tiempo a pesar de que la banda haya llegado a su fin.
Las expectativas de Don Vicente iban más allá de los limites de nuestra ciudad ellos querían llegar a ser conocidos por lo que hacían y estaban dispuestos a entregarlo todo. Esto se vio reflejado en la gran inversión monetaria que realizaron para grabar su primer disco y el despliegue en la mampostería, equipos, iluminación y músicos invitados cuando se hizo la presentación en el Teatro Argentino.
Luego vinieron nuevos recitales y a un paso de grabar el segundo disco se produce un receso inexplicable y Matías Calceta decide no cantar más.
Al tiempo se juntan nuevamente pero con la sola idea de grabar el disco pendiente. Luego de este objetivo Don Vicente llegó a su fin.
Esta banda nace en el año 2000 con Maxi Pascual en batería, Luis Garegnani en bajo y Facundo Escudero en guitarra (ex De Zero), un tiempo mas tarde se suma Manuel Enríquez en segunda guitarra. Faltaba una voz, se prueba Luciano Quintana sin tener suerte y aparece en escena Matías Calzetta (ex. Mema) que de ahí en mas fue irremplazable.La banda se termina de consolidar cuando Maxi pascual y Garegnani abandonan la banda y en su lugar entran Darío Lescano (ex. De Zero) en batería y Juan Pablo Calzetta en bajo.
En algún momento también pasó por la batería “Pipi Díaz”.
La ocurrencia del nombre aparece luego de haber barajado varios como Abril o Leche. En el casamiento de Matías Calzetta el cura devela su segundo nombre que viene de una antigua herencia atrayendo la atención de los integrantes de la banda quienes deciden llamarse Don Vicente.
También manifestaron que el nombre hacia referencia a personaje místico, un espíritu de galera y bastón que vivía entre ellos y habitaba lugares sombríos.
Ellos consideraban que interpretaban un estilo de música alternativa con una gran influencia de bandas que los han marcado, como The Beatles, U2, The cure, Rolling Stones, Pearl Jam, Stone Temple Pilots, Radiohead, Kula Shaker, Palo Pandolfo, Soda Stereo entre otras. Cuentan con dos discos, el primero llamado “La Luz” grabado en los estudios Casa Frida en Capital Federal en el año 2004 y el segundo “Implosión” en el 2008. Si bien fue grabado y mezclado en ese año saldrá a la venta en poco tiempo a pesar de que la banda haya llegado a su fin.
Las expectativas de Don Vicente iban más allá de los limites de nuestra ciudad ellos querían llegar a ser conocidos por lo que hacían y estaban dispuestos a entregarlo todo. Esto se vio reflejado en la gran inversión monetaria que realizaron para grabar su primer disco y el despliegue en la mampostería, equipos, iluminación y músicos invitados cuando se hizo la presentación en el Teatro Argentino.
Luego vinieron nuevos recitales y a un paso de grabar el segundo disco se produce un receso inexplicable y Matías Calceta decide no cantar más.
Al tiempo se juntan nuevamente pero con la sola idea de grabar el disco pendiente. Luego de este objetivo Don Vicente llegó a su fin.
Le hicimos una entrevista a Facundo Escudero.
¿Contame un poco de los lugares que tocaron y los recitales de Don Vicente?
- En Mercedes tocamos por todos lados, algunos de los boliches fueron, Baco, Cleef, Deep, El VIP, Diabla, Scrum, en la calle 29 y 16 por la reapertura de la clínica, en la puerta del Teatro Argentino para fin de año, en El Limonero un par de veces una todos disfrazados, y muchos mas. Presentamos el disco LA LUZ en el Teatro Argentino. También hicimos la presentación del video del primer corte del disco, “Ritmo de la hembra” con temas nuevos. Siempre tuvimos suerte en la sala superior del teatro, las veces que nos presentamos fueron a sala llena. En Chivilcoy tocamos en el Viejo Cuervo, en Luján tocamos en una oportunidad compartiendo escenario con Cabezones y la segunda vez con Carajo, después en Capital lo hicimos un par de veces en San Telmo en Mitos Argentinos, en Palermo en el Imaginario Cultural, en San Isidro en una radio que se llamaba Signos
Recuerdo que una vez tocamos en el restaurante El Aljibe en la 16 y 21, luego de cenar, armamos y nos pusimos a tocar, un quilombo lindo (Risas). En total llegamos a hacer 50 recitales en la vida de DON VICENTE...
¿Cómo ves la grabación del primer disco con el pasar de los años?- LA LUZ editado con una calidad y arte gráfico de primera, no es que haya sido mi banda pero en ese momento fue a mi entender una de las primeras que tomó la iniciativa de un disco con lo que esto significa. Recuerdo que gastamos mucha guita en grabar en un estudio súper profesional, duplicar los cds, el arte y todo eso, pero en ese momento la banda ocupaba un lugar de importancia muy significativo en la vida de todos los integrantes, valía la pena.
El segundo disco está a punto de salir y se llama IMPLOSION grabado en el 2008 en Mercedes y marca el ocaso de la banda, Llegamos a este disco con la idea del final, solo nos juntamos para grabar lo que tanto habíamos trabajado musicalmente. Necesitábamos registrar el mejor momento de Don Vicente como grupo de rock, ya las cosas se complicaban, el estudio, el trabajo y las nuevas obligaciones hacían imposible seguir ese ritmo y decidimos terminar.
¿Cómo ves hoy en día a Don Vicente?- Algo digno de rescatar de la banda es que no éramos los músicos laburadores buscando la perfección, nuestros temas eran una cuestión de lo que iba saliendo y lo que nos gustaba a nosotros. La energía que pusimos desde un primer momento hasta el final era elogiable. En vivo nos matábamos por dejar a la gente contenta, tratábamos de transmitir sensaciones y emociones acompañadas de una banda de sonido que lógicamente tenía que ir acorde, pero no nos desvivíamos por hacer el tema perfecto, era corazón y ganas de que todo aquel que tuviera contacto con Don Vicente la pasara bien.
A Don Vicente lo guardo en el corazón, fue la banda con la que viví sensaciones únicas e irrepetibles, nunca me voy a arrepentir de las cosas que hicimos pero lo bueno de todo esto es que en la música el camino es tan largo que de golpe estás en el ruedo de vuelta y no lo podes creer, con un proyecto nuevo como Pasajeros y como un integrante de este nuevo viaje. ¿Quién sabe donde vamos....no?
¿Contame un poco de los lugares que tocaron y los recitales de Don Vicente?
- En Mercedes tocamos por todos lados, algunos de los boliches fueron, Baco, Cleef, Deep, El VIP, Diabla, Scrum, en la calle 29 y 16 por la reapertura de la clínica, en la puerta del Teatro Argentino para fin de año, en El Limonero un par de veces una todos disfrazados, y muchos mas. Presentamos el disco LA LUZ en el Teatro Argentino. También hicimos la presentación del video del primer corte del disco, “Ritmo de la hembra” con temas nuevos. Siempre tuvimos suerte en la sala superior del teatro, las veces que nos presentamos fueron a sala llena. En Chivilcoy tocamos en el Viejo Cuervo, en Luján tocamos en una oportunidad compartiendo escenario con Cabezones y la segunda vez con Carajo, después en Capital lo hicimos un par de veces en San Telmo en Mitos Argentinos, en Palermo en el Imaginario Cultural, en San Isidro en una radio que se llamaba Signos
Recuerdo que una vez tocamos en el restaurante El Aljibe en la 16 y 21, luego de cenar, armamos y nos pusimos a tocar, un quilombo lindo (Risas). En total llegamos a hacer 50 recitales en la vida de DON VICENTE...
¿Cómo ves la grabación del primer disco con el pasar de los años?- LA LUZ editado con una calidad y arte gráfico de primera, no es que haya sido mi banda pero en ese momento fue a mi entender una de las primeras que tomó la iniciativa de un disco con lo que esto significa. Recuerdo que gastamos mucha guita en grabar en un estudio súper profesional, duplicar los cds, el arte y todo eso, pero en ese momento la banda ocupaba un lugar de importancia muy significativo en la vida de todos los integrantes, valía la pena.
El segundo disco está a punto de salir y se llama IMPLOSION grabado en el 2008 en Mercedes y marca el ocaso de la banda, Llegamos a este disco con la idea del final, solo nos juntamos para grabar lo que tanto habíamos trabajado musicalmente. Necesitábamos registrar el mejor momento de Don Vicente como grupo de rock, ya las cosas se complicaban, el estudio, el trabajo y las nuevas obligaciones hacían imposible seguir ese ritmo y decidimos terminar.
¿Cómo ves hoy en día a Don Vicente?- Algo digno de rescatar de la banda es que no éramos los músicos laburadores buscando la perfección, nuestros temas eran una cuestión de lo que iba saliendo y lo que nos gustaba a nosotros. La energía que pusimos desde un primer momento hasta el final era elogiable. En vivo nos matábamos por dejar a la gente contenta, tratábamos de transmitir sensaciones y emociones acompañadas de una banda de sonido que lógicamente tenía que ir acorde, pero no nos desvivíamos por hacer el tema perfecto, era corazón y ganas de que todo aquel que tuviera contacto con Don Vicente la pasara bien.
A Don Vicente lo guardo en el corazón, fue la banda con la que viví sensaciones únicas e irrepetibles, nunca me voy a arrepentir de las cosas que hicimos pero lo bueno de todo esto es que en la música el camino es tan largo que de golpe estás en el ruedo de vuelta y no lo podes creer, con un proyecto nuevo como Pasajeros y como un integrante de este nuevo viaje. ¿Quién sabe donde vamos....no?
No hay comentarios:
Publicar un comentario